Viajar en familia recortando gastos

Los viajes en familia son una de las experiencias más maravillosas que se pueden realizar. Pueden resultar estresantes en algunos momentos, pero si se organizan bien al final estarán repletos de buenos recuerdos que nos acompañarán toda la vida, incluso cuando hijos y padres ya no convivan y los primeros tengan sus propias familias con las que viajar.

Pero es evidente que viajar no es barato y en familia puede llegar a ser una inversión importante. Por eso, es importante conocer todos los trucos para ahorrar dinero sin renunciar a tener una fantástica experiencia. Ahorrando en aquello que no es necesario se podrá gastar en lo que realmente importa e incluso conseguir que la factura total del viaje se reduzca.

El ahorro comienza en el mismo momento en el que se va a reservar el vuelo de avión. Las compañías de bajo coste pueden ofrecer servicios más básicos y menos lujosos, pero nos llevarán a destino igualmente. Si viajas con niños pequeños, asegúrate de que al menos uno de ellos viaja al lado de un adulto, pero si los hijos ya tienen edad, no reserves asientos y de esta manera ahorrarás dinero.

Vete al aeropuerto en tu vehículo privado, será la forma más económica de desplazarse siendo varios y también la más cómoda con los niños. Pero ni se te ocurra dejar el coche en el parking privado del aeropuerto porque pagarás una fortuna. En lugar de eso debes de saber que hay en lavacolla aparcamiento privado de bajo coste donde dejar tu vehículo y ellos se encargarán no solo de llevar a toda la familia al aeropuerto, sino también de recogerla a la vuelta.

En cuanto al viaje en sí, en lugar de encargar excursiones organizarlas por vuestra cuenta, incluso alquilando un vehículo en el punto de destino para moverse con tranquilidad y sin pagar billetes de transporte público. Y en lugar de un hotel convencional, optar por alquilar un apartahotel. Es la mejor de las opciones porque podréis cocinar, ahorrando mucho en desayunos y cenas, por ejemplo, pero a la vez dispondréis de comodidades como un servicio de limpieza, por lo que serán vacaciones de verdad.

Los gastos en comidas fuera de casa son los que más suben las facturas de las vacaciones, por lo que llevar picnics es otra forma de ahorrar dinero, pudiendo disfrutar de un helado o de un refresco sin que suponga un problema para el presupuesto familiar.